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| Imagen extraída de pixabay.com |
Nunca
jamás he abandonado las trincheras. Nunca he dejado, ni un solo momento, a
nuestros compañeros de viaje. Durante muchos meses he estado ausente, pero eso
no quiere decir que no haya trabajado o que me haya olvidado de la segunda
parte de nuestra historia.
Ha
habido muchos cambios en mi vida —todos a bien y por los
que me siento muy agradecido— en los que necesitaba acoplarme
de una forma u otra. Llevo semanas consiguiendo poder seguir trabajando por esta
historia que llevo a cuestas en mi cabeza (ya van 7 años con ella) y que ya he reescrito
cuatro veces.
He modificado personajes,
escenarios y he introducido nuevas tramas que junto a la historia de la Columna
de Hierro y del batallón Ruesca-Taíno conformarán mi segunda novela.
Soy poco de los hábitos de
año nuevo, pero de nuevo me encuentro con fuerzas para tomar Teruel y luchar en
la batalla del Alfambra junto a Antonio Ureña y sus amigos hasta el final.
Poco a poco volveré a
compartir contenido en las redes sociales para que podáis ver de nuevo los
avances de la historia de todos vuestros familiares que conformaron este
batallón y que tantos dolores de cabeza me trae.
Nos vemos muy pronto por
las trincheras.
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